Una empanada es una fina masa de pan, masa quebrada u hojaldre rellena con una preparación salada, dulce, cocida, horno o frita.
El relleno puede incluir carnes rojas o blancas, queso, pescado, verduras o fruta.
La masa, generalmente, es de harina de trigo, (aunque también puede usarse harina de maíz u otros cereales), y suele llevar alguna grasa, aceite o manteca. Las empanadas son un plato tradicional de los argentinos.
Milanesa:
La milanesa es un filete, normalmente de carne vacuna pero también puede ser con pollo o cordero empanado, el cual se cocina frito o al horno.
Por extensión, se llama milanesa a cualquier rebanada de un ingrediente rebozado y cocido de manera similar, por lo que existen milanesas de cerdo, de pollo, de pescado, de soja, de berenjena o de mozzarella, entre otros ingredientes.
Asado:
El asado, barbacoa, parrilla o parrillada es una técnica de cocción mediante la cual los alimentos (generalmente cortes de carne), son expuestos al calor de fuego o brasas para que se cocinen lentamente.
El calor se transmite gradualmente al alimento, que por lo general está suspendido sobre el fuego o cerca de las brasas.
El fuego se logra a partir de carbón vegetal o de madera, aunque hay también parrillas de gas. Las maderas más usadas son maderas duras como las de roble, mezquite, quebracho o coronilla, que arden a temperaturas altas y por un tiempo prolongado. Si bien la carne más empleada es la carne vacuna, también se asa carne de cerdo, de cordero, cabrito, pescado, pollo, langostinos y diversos embutidos.
Choripan:
Choripán (acrónimo de chorizo, a veces abreviado chori y pan) es una comida que consiste básicamente en un chorizo asado que se sirve entre dos trozos de pan, típica de la gastronomía de Argentina. Se prepara generalmente con pan francés y chorizo asado a la parrilla.
El chorizo es el denominado criollo o parrillero, de consistencia blanda y aspecto crudo, compuesto por aproximadamente 70% de carne vacuna y 30% de cerdo. Típico del área rioplatense y que, a diferencia del de otras zonas, es consumido fresco, sin desecar ni ahumar.
Suele condimentarse con alguna salsa como el chimichurri (aderezo típico argentino y uruguayo elaborado con perejil, ajo, ají y orégano). Su popularidad alcanza a incluirlo entre uno de los diez platillos favoritos de Argentina.